The Long Road es una newsletter sobre el proceso de desarrollo de mi proyecto Adeus. Un trabajo fotográfico sobre la desaparición de la cultura rural tradicional de Galicia. Puedes recibirla periódicamente suscribiéndote, optando por la modalidad de suscripción gratuita o la suscripción de pago si quieres contribuir y apoyar el desarrollo del proyecto. ¡Espero que la disfrutes!.
The Long Road is a newsletter about the development process of my ongoing project Adeus. A photographic work about the disappearance of the traditional rural culture of Galicia. You can receive it periodically by subscribing, opting for the free subscription or the paid subscription if you want to contribute and support the development of the project, enjoy it!
Hello Friends,
Today I want to tell you about Oscar, Dulcina and Constantino.
Hola amigos,
Hoy quiero hablaros de Oscar, Dulcina y Constantino.
Some situations end up becoming common during the development of a project, by the simple fact of visiting places that are connected to each other. Sometimes it is the characteristic of the territory, the commonality of its customs, or the character of those who inhabit it, which makes everything familiar. The fact of driving along some lost road and finding, for example, herds passing through it on their way to and from pastures and shelter, is the kind of situation that is part of everyday life.
But on certain occasions, a small detail turns that meeting into something extraordinary. A simple glance, something in the tone of voice of that person in front of you, denotes that complicity has been established that has allowed you to establish a bond. Identifying these moments depends more on a presentiment or intuition that there is something deeper than what is perceived by the naked eye. Something that if one stops, if one generates the opportunity to get to know the other, it just happens. Last December 8 I crossed paths with Oscar and his flock, they were walking back to their home taking advantage of the last lights of the day, I stopped the car and I stopped to greet him. It was, once again, the beginning of a series of encounters that have remained engraved in my memory.
Hay situaciones que terminan por hacerse comunes durante el desarrollo de un proyecto, por el simple hecho de visitar lugares que tienen conexión entre sí. A veces es lo característico del territorio, lo común de sus costumbres, o el carácter de quienes lo habitan, lo que hace que todo sea familiar. El hecho de ir conduciendo por alguna carretera perdida y encontrarme, por ejemplo, con rebaños que transitan por ella en sus idas y venidas hacia pastos y refugio, es el tipo de situación que forma parte de lo cotidiano.
Pero en determinadas ocasiones, un pequeño detalle convierte ese encuentro en algo extraordinario. Una simple mirada, algo en el tono de voz de esa persona que está frente a ti, denota que se ha establecido una complicidad que os ha permitido establecer un vínculo. Identificar estos momentos depende más de un presentimiento o de la intuición de que hay algo más profundo que lo que se percibe a simple vista. Algo que si uno se detiene, si genera la oportunidad de conocer al otro, simplemente sucede. El pasado 8 de diciembre me crucé con Óscar y su rebaño, caminaban de vuelta hacia su casa aprovechando las ultimas luces del día, paré el coche y me detuve a saludarlo. Fue, una vez más, el inicio de una serie de encuentros que han quedado grabados a fuego en mi memoria.
Sentido Pésame, (diario). Día 48.
The contact with people is undoubtedly what gives me the most satisfaction. Beyond the inertia of the start, generated by the photographic, having the opportunity to know their lives, to express aloud the reasons that lead me to them, to use listening as a master key to access the intimacy of others and give rise to the unexpected, is what I enjoy the most. The photograph is the memory that is generated to return to that place, to that moment, but the lived experience is what changes you inside. That is the privilege that the photographer enjoys.
In Oscar, I found a simple person. We greeted each other and talked about our reasons for being there. We chatted about our experiences and our relationship with that place until after a while he had to continue on his way. It was starting to get cold and it was time to leave, just as the animals we had already lost sight of had done. His wife was waiting for him to light the fire with the help of the pine cones he carried on his shoulders. Before leaving, he allowed me to take his picture and we said goodbye until we met again.
El contacto con la gente es sin duda lo que mas satisfacción me aporta. Mas allá de la inercia del arranque, generado por lo fotográfico, tener la oportunidad de conocer sus vidas, de expresar en voz alta los motivos que me conducen a ellos, de usar en definitiva la escucha como llave maestra para acceder a la intimidad de otros y dar pie a lo inesperado, es lo que más disfruto. La fotografía es el recuerdo que se genera para regresar a ese lugar, a ese momento, pero la experiencia vivida es lo que realmente te cambia por dentro. Ese es el privilegio del que disfruta el fotógrafo.
En Óscar encontré a una persona sencilla. Nos saludamos y hablamos de los motivos que a cada uno nos hacían estar allí. Charlamos de nuestras experiencias y de nuestra relación con aquel lugar, hasta que pasado un buen rato tuvo que continuar su camino. Comenzaba a hacer frío y era hora de retirarse, igual que habían hecho los animales a los que ya habíamos perdido de vista. Su mujer le esperaba para encender el fuego con la ayuda de las piñas que transportaba sobre sus hombros. Antes de irse, me dio la oportunidad de retratarlo y nos despedimos hasta un nuevo encuentro.
It was at that moment, when Oscar was walking away down the road towards his house, that I saw a woman appear at the end of the road heading towards me. At first, I thought it was his wife, who came looking for him, but they simply greeted each other as they passed each other and she continued on her way in my direction. I waited until she reached my height and when our eyes met, as had happened with Oscar, I introduced myself and explained my reasons for being there.
Dulcina, a neighbor, was out for a walk. To stretch her legs. With tremendously curious and happy eyes she asked me about my work and the conversation led to her inviting me to accompany her to her house, to "have a coffee" and to know her story. She gave me the opportunity I was waiting for.
Fue en ese momento, cuando Óscar se alejaba por la carretera rumbo a su casa, que vi aparecer al fondo del camino a una mujer que se dirigía hacia donde yo estaba. En un primer momento pensé que era su mujer, que venía en su busca, pero simplemente se saludaron al cruzarse y ella continúo su camino en mi dirección. Esperé hasta que llegó a mi altura y cuando nuestras miradas se cruzaron, al igual que había sucedido con Óscar, me presenté y le expliqué los motivos que me llevaban a estar allí.
Dulcina, vecina del lugar, había salido a dar un paseo. A estirar las piernas. Con ojos tremendamente curiosos y alegres me preguntó por mi trabajo y la conversación dio pie a que pasado un rato me invitase a acompañarla a su casa, para “tomar un café” y conocer su historia. Me concedió así la oportunidad que estaba esperando.
As soon as I parked the car in front of their house, I met Constantino, her husband, whose gesture showed his joy during my visit. While Dulcina was preparing things inside her house, I took the opportunity to get to know the surrounding land with him. It was time to feed the animals, "the years are already heavy" Constantino lamented, but raising them is essential for the difficult subsistence in the countryside.
When we all sat down together in the kitchen later, I took the opportunity to talk to them more calmly about my project, about my connection with their world, about what I want to tell them, and what it means to me to do it. I am the one who appears by surprise and they certainly deserve to know what are the reasons that lead me to be there, in front of them, recording everything they say and portraying their lives.
Nada más aparcar el coche frente a su casa conocí a Constantino, su marido, cuyo gesto denotaba alegría por mi visita. Mientras Dulcina preparaba cosas en el interior de su casa, aproveché para conocer junto a él el terreno que la circunda. Era la hora de alimentar a los animales, “los años pesan ya” se lamentaba Constantino, pero criarlos es fundamental para la difícil subsistencia en el rural.
Cuanto nos sentamos más tarde todos juntos en la cocina, aproveché para hablarles con más calma de mi proyecto, de mi conexión con su mundo, de lo que busco contar y de lo que supone para mí hacerlo. Soy yo quien aparece por sorpresa y sin duda merecen saber cuales son los motivos que me llevan a estar allí, frente a ellos, grabando cada cosa que dicen y retratando sus vidas.
We talked about many things, some more common and others, exceptional, which are what make up the unique history of each of them. The post-war years were undoubtedly the most difficult and Constantino, born in 1939 just after the end of the civil war, remembers with a lost look how his mother, with his newborn brother, had to emigrate to Barcelona to be a nursemaid for another child, giving the milk to a stranger that she should have offered to her son in exchange for some money.
Hablamos de muchas cosas, algunas más comunes y otras, excepcionales, que son las que conforman la historia única de cada uno de ellos. Los años de la posguerra sin duda fueron los mas difíciles y Constantino, nacido en 1939 justo al terminar la guerra civil, recuerda con la mirada perdida cómo su madre, con su hermano recién nacido, tuvo que emigrar a Barcelona para ser ama de cría de otro niño, dándole a un desconocido la leche que debía haberle ofrecido a su propio hijo a cambio de algo de dinero.
Everyone I have met holds within them a universe of small details, of fractions of a second that have a meaning as profound as the roots of the trees that border their land. As a photographer, I can barely catch a glimpse of all that makes one gesture follow another, of silence or a lost look when remembering an image that only exists within those I portray. And yet, every day I try to look better and deeper, feeling fortunate to sense something that allows me to witness the inner landscape of these people, who have so generously invited me to listen to them.
Todos a los que he conocido guardan dentro de sí un universo de pequeños detalles, de fracciones de segundo que tienen un significado igual de profundo que las raíces de los árboles que bordean sus tierras. Como fotógrafo apenas puedo captar un destello de todo lo que hace que un gesto vaya detrás de otro, del silencio o una mirada perdida al recordar una imagen que solo existe dentro de aquellos a los que retrato. Y aún así, cada día intento mirar mejor y más dentro, sintiéndome afortunado al intuir algo que me permita ser testigo del paisaje interior de esas personas, que tan generosamente me han invitado a escucharlos.
See you in two weeks with new experiences. Have a happy 2023. From Galicia, January 2023.
Nos vemos en dos semanas con nuevas experiencias. Tened un feliz 2023. Desde Galicia, enero 2023.